Todo lo que aprendí, lo aprendí de vivir, de borrar, de escribir, de tocar el cielo y de caer con ganas de volver. Aprendí de llorar, de reír, de soñar, de ir al fin del mundo y regresar con ganas de volar. Aprendí de latir, de querer y de seguir libre.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario