¿Cómo hace uno para no amarlos, a todos? Es imposible, y es lo más lindo que le puede pasar a un ser humano en la vida: Amarlos.
Son 7 regalos de Dios, algunos llegaron mas maduritos, otros llegamos blandos por madurar. Algunos altos, otros petizitos, algunos morochos, otros rubios, algunos vagos, otros laburadores, algunos más carilindos, pero otros más carismáticos, algunos vinimos mas gordos y otros con un cuerpo brutal. Pero todos acá estamos, para disfrutar cada asado juntos, cada risa, cada abrazo. De algunos se sabe poco y nada, y de nadie se sabe todo. Uno nunca termina ni de conocerse a uno mismo, ¡imaginate a otros 6!
Son mis hermanos y los amo, estoy orgullosa de ser Carbone con todo lo que mi apellido implica, orgullosa de ser amada y de amarlos tanto tanto que me quedo corta con los tanto.
Son parte de mi alma, siempre están en mi corazón.
Eternamente, Cata
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